El Grupo Mixto-Adelante Andalucía presentó una Proposición no de Ley (PNL) que demanda a la Junta de Andalucía una regulación de las casas de apuestas a partir de distintas medidas, como una limitación en sus horarios de apertura entre las 11 p.m. y las 5 a.m.
La propuesta, que será debatida en el Pleno del Parlamento andaluz, establece que dicha limitación sería una “medida disuasoria” que ayudaría a grupos como “adolescentes, jóvenes y personas con enfermedades relacionadas con el juego, como la ludopatía o el juego patológico”.
El texto, publicado en el Boletín Oficial del Parlamento de Andalucía, plantea también “impedir el establecimiento de locales dedicados a las apuestas y al juego de azar a menos de 500 metros de centros escolares” que impartan enseñanzas como Educación Secundaria Obligatoria (ESO), Bachillerato, Formación Profesional Básica y enseñanzas artísticas profesionales.
Además de estas dos medidas, Adelante Andalucía reclamó a la Junta de la comunidad autónoma “regular la publicidad de las empresas y negocios de apuestas” de la misma forma que se hace con “otras prácticas y productos nocivos para la salud, como el tabaco y el alcohol”.
A su vez, el grupo parlamentario exhortó al Ejecutivo autonómico a propiciar “la creación de contenidos informativos y divulgativos y acciones de comunicación”, dirigidos a la audiencia joven a través de la radio y televisión, a fin de que ayude a “la prevención de las actividades de juego y las enfermedades derivadas de su práctica”.
En ese contexto, acusaron una “proliferación” de esta actividad empresarial “en barrios y zonas de los núcleos de población donde no se discrimina por el potencial peligro que presentan para la juventud”, de manera que, según datos públicos, los establecimientos de juego “se encuentran en muchos casos apenas a unos metros de espacios públicos donde la presencia de niñas y jóvenes andaluces es constante”.
Asimismo, la iniciativa destacó que, según estudios recientes, desde hace una década “la franja de los 35 a 50 años era más proclive a caer en la adicción al juego”, antes de advertir de la afectación actual en otra franja de edad, entre los 18 y los 30 años.
Por ello, lamentaron que no “se haya podido evaluar de forma cierta la incidencia de estas prácticas entre menores de edad”, hecho que reconoce se produce también por “encontrarse fuera de la edad legal para estas actividades”.
Finalmente, Adelante Andalucía criticó el papel de la publicidad “en la normalización del juego de azar”, junto a un fenómeno añadido como irrupción de personajes célebres, entre ellos, “deportistas de élite, personajes de televisión o personas influyentes”.