Cómo la industria del iGaming está impulsando la economía mundial

El sector del iGaming crece cada vez más rápido, y el aumento de los ingresos conduce a un incremento de las contribuciones sociales. En un nuevo análisis, Ayvar Gabidullin, director de Desarrollo de Negocios de Slotegrator, explica cómo el juego online se ha convertido en una parte fundamental del crecimiento económico mundial.

Cada año, los casinos físicos pierden popularidad a medida que un número creciente de jugadores opta por tirar los dados o jugar a las tragamonedas en línea. Aunque esta tendencia viene creciendo desde hace tiempo, se aceleró drásticamente con la pandemia, cuando las cuarentenas y otras restricciones redujeron los flujos de ingresos de los casinos físicos a un nivel mínimo. En general, los usuarios modernos consideran que los casinos en línea son más cómodos y convenientes que los casinos físicos, y disfrutan especialmente de la increíble variedad de contenidos de juego disponibles.

Según las previsiones de un informe exclusivo de Acumen Research and Consulting, el tamaño del mercado de los juegos de azar en línea alcanzará unos USD 172.000 millones en 2030, con un crecimiento anual del 11,6% debido al aumento de las apuestas móviles. Esta dinámica puede deberse al aumento del número de operadores en los distintos mercados, ya que lanzar un casino online es mucho menos costoso que abrir un establecimiento de juego terrestre. Las plataformas de juego online no necesitan una gran plantilla, instalaciones de capital y un pesado equipo de juego, sólo un software de calidad. Con una planificación presupuestaria adecuada, los operadores de casinos en línea tienen bajos costes de mantenimiento. Por lo tanto, cada vez más inversores se sumergen en el iGaming y, respectivamente, el mercado está creciendo.

Los operadores disponen de algunas herramientas para ampliar su negocio. Pueden integrar nuevos juegos que se adapten al gusto de su público objetivo, ofrecer bonificaciones y programas de fidelización, ampliar sus actividades de marketing, etc. Los operadores que hacen un buen uso de estas herramientas suelen ser capaces de dirigir un negocio muy competitivo.

Impacto de las apuestas en la economía

Casi todas las jurisdicciones cobran impuestos sobre el juego a los operadores de casinos. Los Estados utilizan estos impuestos para financiar programas sociales cruciales. Aunque esto suele comenzar con los programas de prevención de los daños causados por el juego, no se detiene ahí; la salud pública y las iniciativas deportivas son beneficiarios habituales de los ingresos de los impuestos sobre el juego. En muchos países, el iGaming aporta una parte sustancial de los ingresos fiscales totales.

El juego en línea también tiene otros beneficios económicos. Por ejemplo, con el desarrollo del mercado, aumenta el número de proyectos relacionados: sitios que ofrecen análisis de juegos de azar, empresas de tecnología financiera, agencias de marketing digital, etc. Estos, a su vez, impulsan la creación de empleo y más contribuciones fiscales. Esto se convierte en un efecto dominó con un impacto positivo en la economía global.

El software es necesario para lanzar un proyecto de juego. La mayoría de los operadores no tienen conocimientos suficientes para desarrollar un software de alta calidad, por lo que recurren a contratistas. Lo mismo ocurre con el alojamiento web, lo que crea más oportunidades de trabajo para ambos segmentos.

El desarrollo de la industria del iGaming contribuye a un cambio de paradigma económico. Cada año hay más operadores de casinos online, especialmente en los mercados emergentes de África, Asia y América Latina. Todos se benefician de ello: el Estado, las empresas y los consumidores.