El presidente de Panamá, José Raúl Mulino, informó durante su segunda conferencia de prensa que decidió eliminar la lotería electrónica con el objetivo de mejorar eficiencia y credibilidad de la Lotería Nacional de Beneficencia (LNB) e impulsar su transformación. La decisión fue tomada a partir informes de la LNB que, según Mulino, “no son nada alentadores”.
Durante su segunda presentación ante la prensa luego de haber asumido el pasado 1 de julio, el mandatario aseguró que le ordenó a Saquina Jaramillo, la nueva directora de la LNB, poner fin a los juegos Lotto y Pega 3 de la lotería electrónica de Panamá, que suelen jugarse los días martes y sábados. Scientific Games LLC. es la empresa detrás de la concesión a 10 años de las loterías digitales.
En esta línea, Mulino destacó que de ahora en más la LNB se enfocará en los sorteos tradicionales de Miércolito, Dominguito y el Gordito del Zodiaco,
“Se acabó el resto, que lo único que hace es mermar la eficiencia y rentabilidad de nuestra lotería, beneficiando a algunos que lucran con el tema de las loterías electrónicas, las cuales este año generaron una venta bruta semanal de USD 900.000”, añadió.
También advirtió que la LNB es una institución carente de sistematización, por lo que se solicitará a las autoridades del área de modernización del Gobierno trabajar en esto, “porque manejar esa entidad sin sistemas es lo más cercano al desastre y a la quiebra”.
Mulino detalló que la LNB reporta en el mes en curso una devolución del 27%, seis puntos porcentuales menos que el mes pasado, y lo calificó como un valor alto. Recordó que hay 13.500 billeteros en el país, quienes generan comisiones por el 10% de sus ventas.
“La comisión de los billeteros es del 12.5%, un poco más que la de la Lotería Nacional de Beneficencia, lo cual asciende a un monto de USD 117.000, y el operador también gana un 2% de la venta bruta”, indicó el mandatario.
“Esto no es negocio para el Estado. Es negocio para alguien, pero no para el Estado. Así que esta institución será sometida a una transformación eficiente, transparente y honesta, con el ánimo de volverla a ser una entidad con credibilidad y beneficencia para el pueblo panameño”, opinó Mulino.
También informó que se está elaborando un anteproyecto de ley para modificar la actual Ley Orgánica de la Lotería, de data de 1969. “Deseo establecer su modificación, entre otras cosas, para poder darle un reconocimiento mayor a esos miles de billeteros que son los hacen posible la rentabilidad de la lotería y, por supuesto, el consiguiente beneficio que le da a la población”, expresó.
Cabe recordar que, días atrás, una publicación del medio Panamá América reveló que el negocio de la lotería electrónica se armó y se impulsó desde el gobierno de Laurentino Cortizo, y que tanto Publio De Gracia, extitular de la Dirección General de Ingresos (DGI), como Luis Oliva, exadministrador de la Autoridad Nacional para la Innovación Gubernamental (AIG), forzaron la implementación de los juegos Lotto y Pega 3.
Por su parte, los vendedores de chances y billetes de la LNB de Panamá afirmaron que podrían iniciar acciones legales contra funcionarios de la antigua administración, por las pérdidas económicas que ha generado a la institución benefica.