El Parlamento de Canarias convalidó el decreto ley que tiene entre sus objetivos establecer medidas urgentes para proteger a los menores de edad frente a los juegos de azar y las apuestas en dicha comunidad autónoma española.
El Decreto Ley 7/2024, aprobado por el Consejo de Gobierno de Canarias, se elaboró a propuesta de la consejera de Presidencia, Administraciones Públicas, Justicia y Seguridad, Nieves Lady Barreto.
Según indicaron, el decreto ley permite “corregir la situación generada por una sentencia judicial que permite instalar salones de juego a menos de 300 metros de centros educativos de educación infantil y primaria”.
A partir de ello, el actual decreto ley determina reglamentariamente la zona de influencia en la que no podrán ubicarse establecimientos para la práctica del juego por la previa existencia de un centro de enseñanza o un centro permanente de atención a los menores.
La prohibición será extensiva a los bares, cafeterías o establecimientos similares, situados en la indicada zona de influencia que no tengan por actividad principal la práctica del juego. El decreto ley considera centros de enseñanza los que tengan usuarios de una edad entre los 6 y los 17 años.
Nieves Lady Barreto
De acuerdo al decreto, la zona de influencia en la que no podrán estar ubicados salones recreativos y de juegos, sea por nueva instalación o por traslado de los autorizados, por la previa existencia de otro salón recreativo y de juegos, será la comprendida en un radio de acción de 200 metros en línea recta, medida sobre plano, desde cada una de las puertas de acceso del que se pretende instalar.
En tanto, se advierte que dicha distancia no será aplicable cuando se trate de salones recreativos y de juegos sin acceso directo a la vía pública en centros comerciales, si bien, para los que se pretendan instalar en una misma planta de dichos centros comerciales, la distancia a aplicar será la de 75 metros.
Por último, la nueva legislación fija la medida de 200 metros con las mismas características como zona de influencia entre un salón recreativo y de juego y una sala de bingo.