El presidente del Instituto Brasileño de Juego Responsable (IBJR), Andre Gelfi, estuvo presente en SBC Summit Rio 2025, donde participó del panel "Tech Talk: Where Innovation Meets Regulation", el pasado 27 de febrero.
En el debate, el ejecutivo dijo que veía con buenos ojos la reglamentación brasileña y destacó como diferenciador la exigencia del reconocimiento facial para que los apostadores accedan a los sitios de apuestas.
"En realidad, Brasil aporta a este mercado regulado algunos componentes que no tienen precedentes. El reconocimiento facial es trivial para los brasileños, pero para nuestra industria es absolutamente novedoso", afirmó.
En opinión de Gelfi, el hecho de que la normativa brasileña sólo lleve en vigor dos meses hace difícil hacer un análisis completo de lo que hay que mejorar en el proceso. "Pero en base a lo que vimos y conociendo la regulación, vamos a tener dificultades para trabajar en el tema de la publicidad, especialmente en plataformas, influenciadores y contenido orgánico, creo que todavía parece flojo. Me parece que ahí tenemos un talón de Aquiles", sostuvo.
"También creo que la normativa brasileña no menciona a los proveedores de juegos, y podría ser una forma de abordar la canalización. Pero, en general, somos muy optimistas con lo que ya tenemos. Creo que el principal elemento de esta nueva agenda reguladora son los datos que vamos a extraer del mercado regulado a partir de ahora", añadió.
Preguntado durante el panel, sobre qué modelos regulatorios podrían considerarse ejemplos positivos, el ejecutivo citó los aplicados en Inglaterra, Italia, Dinamarca y España. "Y tenemos mercados recientes que también impresionan por su modernidad y la forma en que están estructurados, como el mercado de Ontario en Canadá", comentó.
Poco después de terminar el panel, y en una breve entrevista con Yogonet, el director general del IBJR declaró que ve el Impuesto Selectivo como un gravamen "que no corresponde".
El Impuesto Selectivo, apodado "impuesto del pecado", fue aprobado en 2024 como parte de la normativa de la reforma fiscal, y gravará productos considerados nocivos para la salud y el medio ambiente, entre ellos el alcohol, los cigarrillos y el juego físico y en línea. Sin tipo todavía definido, el Impuesto Selectivo debería entrar en vigor a partir de 2027.
"El Impuesto Selectivo grava un impuesto que ya pagamos, que es la contribución social del 12%. Lamentablemente, nuestra petición no fue aceptada y ahora vamos a trabajar para mitigar el impacto que esto tendrá en la competitividad de nuestro negocio. No debemos olvidar que los impuestos son una de las principales palancas que determinan el éxito de nuestra industria regulada. Si endurecemos demasiado los impuestos, dificultamos la canalización del mercado e incluso podemos acabar recaudando menos", finalizó.