El abogado Carlos Baeza, representante legal de la Agrupación de Apuestas en Línea, comentó el estudio realizado por la consultora Yield Sex sobre el sector del juego online en Chile y, a partir de los resultados, afirmó que es “urgente” contar con una regulación.
Según el informe de la consultora estadounidense, los ingresos brutos del iGaming en Chile alcanzaron los USD 3.100 en 2024. Además, durante ese año operaron 3.816 plataformas y unos 5,4 millones de chilenos interactuaron con contenido de apuestas online, un 29% de la población total del país.
A partir de ello, Baeza afirmó que los resultados del informe “son contundentes” y muestran “por primera vez, con contornos claros, la realidad invisible de un mercado que necesaria y rápidamente debe ser regulado”.
“Esto confirma que no estamos hablando de un mercado marginal, sino de una industria consolidada que opera sin una regulación adecuada. La regulación no solo es necesaria, sino urgente”, remarcó.
Cabe recordar que, en abril de 2024, el proyecto de ley para regular el iGaming en Chile fue aprobada de manera general por la Comisión de Economía del Senado y derivada a la Comisión de Hacienda, donde no se ha discutido desde ese entonces. El proyecto ya recibió la media sanción de la Cámara de Diputado en diciembre de 2023.
En ese marco, Baeza sostuvo que no regular dicho mercado implica perder una recaudación muy importante en un contexto de déficit fiscal y concluyó que la regulación de las plataformas “permitirá financiar políticas públicas de forma permanente”, lo que “es una buena noticia para Chile y para el Ministerio de Hacienda”.
El abogado advirtió que el iGaming en Chile podría alcanzar una recaudación fiscal entre USD 600 millones y USD 800 millones anuales, un monto que supera los USD 50 millones calculados por Hacienda en su momento.
“Las estimaciones muestran que, con una regulación adecuada, la recaudación fiscal podría ser 10 veces más de lo proyectado por Hacienda. Estos recursos equivalen al financiamiento de políticas clave como la reforma de pensiones o la condonación del Crédito con Aval del Estado”, explicó.
Baeza planteó que la recaudación fiscal aumentaría con una carga tributaria adecuada, que potencie la tasa de canalización.
En ese sentido, concluyó que “si se corrige la carga tributaria que establece hoy el proyecto, que llega a 37,6% —incluyendo IVA— por una carga tributaria promedio a nivel mundial del 22%; la recaudación fiscal puede pasar de USD 800 millones a USD 1.000 millones al año”.