La Autoridad de Fiscalización del Juego (AJ) de Bolivia allanó siete salas de juego clandestinas que operaban en Santa Cruz e incautó 250 máquinas.
Los operativos, que se llevaron a cabo en coordinación con el Ministerio Público y la Policía Nacional, tuvieron lugar en varias zonas de la capital oriental.
“Los establecimientos clandestinos están implementando mecanismos de seguridad avanzados y las infraestructuras que van utilizando son cada vez más adecuadas para generar esta actividad ilegal”, informó Jessica Saravia, directora ejecutiva de la entidad.
Si bien las salas de juego fueron clausuradas, no hay personas detenidas. “Las máquinas secuestradas fueron trasladadas a depósitos de la AJ y posteriormente serán destruidas, tal como establece la norma”, explicaron en un comunicado oficial.