Las cajas de recompensas de los videojuegos podrían ser reclasificadas como juegos de azar

El Departamento de Deporte, Medios de Comunicación, Cultura y Contenido Digital (DCMS) anunció que, esta semana, lanzará una convocatoria para la presentación de evidencia sobre las cajas de recompensas, el elemento controversial de los videojuegos, que les permite a los jugadores gastar dinero en recompensas que son parte del juego, como elementos de personalización o equipos especiales, sin saber lo que recibirán.

La iniciativa surgió por la creciente preocupación de que la dinámica de las cajas de recompensas pueda estar fomentando un comportamiento similar al del juego en los niños, lo que puede predisponerlos a la ludopatía en su vida adulta, afirma The Guardian.

El valor de las cajas de recompensas en la industria de los videojuegos está estimado en £23 mil millones por año. Y la cifra aún crece, gracias a los ingresos que siguen generándose incluso después de la compra inicial del juego.

Si los ministros decidieran reclasificar las cajas de recompensas, la decisión tendría un impacto importante en los desarrolladores de videojuegos, quienes podrían verse forzados a retirar algunos títulos o rediseñarlos para poder venderlos a menores de 18.

Aunque involucran el azar, no están alcanzadas por las leyes actuales que regulan los juegos de azar (ni reguladas por la Comisión de Juegos de Azar), ya que se considera que los artículos que se "ganan" no tienen un valor económico.

Sin embargo, el año pasado, el comité selecto de la DCMS analizó evidencia que sugería que lo ganado en las cajas de recompensas podía intercambiarse fácilmente por dinero en sitios web de terceros y que era probable que su uso por parte de los desarrolladores de videojuegos "facilitara el enriquecimiento a costa de personas adictas al juego".

En un informe posterior, este comité influyente afirmó que deberían ser consideradas juegos de azar.

"Son un commodity virtualmente especulativo que solo contribuye a normalizar y alentar a los jóvenes a apostar", dijo Carolyn Harris, miembro del Parlamento por el Partido Laborista, quien encabeza un grupo interpartidario de miembros del Parlamento que investiga los daños relacionados a los juegos de azar. "En general, esto lleva a los jóvenes a desarrollar la ludopatía".

Las cajas de recompensas ya se consideran juegos de azar en países como Bélgica, donde las compañías han tenido que retirar sus videojuegos del mercado.

En una investigación publicada el año pasado por académicos de la Universidad de York, se detectó que las cajas de recompensas son cada vez más preponderantes y se destacan en más del 71 % de los títulos más populares del portal de videojuegos Steam, comparado con el 4 % registrado hace una década.

La comisionada de los niños para Inglaterra, Anne Longfield, ha expresado su preocupación sobre la cantidad de dinero que los niños acaban gastando y el peligro de que sigan colocando dinero para obtener los artículos que desean, como un jugador que intenta recuperar el dinero perdido.

Los cambios en la regulación de las cajas de recompensas podrían incluirse en una revisión más amplia de las leyes que regulan los juegos de azar, lo que fue planteado por el Partido Laborista en 2005 y considerado como inadecuado para la era digital por los defensores.