Desde el 2011, los despachos de lotería se llevan un 4% de las ventas que efectúan del sorteo extraordinario del 22 de diciembre o, lo que es lo mismo, 80 céntimos por décimo.
La comisión es la más baja del conjunto de los juegos que comercializan; ya que, por ejemplo, la remuneración pactada para la Lotería Nacional, Quiniela y Quinigol es del 6% de las ventas, mientras que en el caso de juegos como La Primitiva, Bonoloto, El Gordo de la Primitiva, Euromillones, Quintuple y Lototurf es del 5,5%.
Tanto la Agrupación Nacional de Asociaciones Provinciales de Administradores de Lotería (ANAPAL), asociación mayoritaria del sector, como otras como Loteros Independientes (PIDAL) han trasladado a Loterías y Apuestas del Estado (SELAE) una petición para que se equipare la comisión que perciben de las ventas de la lotería de Navidad, del 4%, a la que suelen llevarse por la comercialización de la mayoría de los juegos, del 6%.
Asimismo, desde ANAPAL reclaman “una actualización del sistema de comisiones”, ya que argumentan que este se mantiene invariable desde hace 16 años. La medida contribuiría a mejorar las arcas de los 4.000 establecimientos de lotería que hay en España, un tercio de los cuales “están en el umbral de la rentabilidad" y "peligra que puedan seguir realizando su actividad”, con lo que están en riesgo parte de los 14.000 empleos que genera el sector.
Además de estas comisiones, las administraciones también se llevan un porcentaje de los premios que reparten, que es del 2,5% hasta un importe de 200.000 euros en premios, y del 1,25% si se supera este importe. A lo que hay que sumar las comisiones por pago de premios. Remuneración que en los últimos años ha ido a la baja, aseguran, por las medidas que se han aplicado contra el blanqueo de capitales que han conllevado una reducción de los importes que se pueden cobrar por ventanilla, cantidades que actualmente no pueden ser superiores a 2.000 euros.