Las salas de juego que opera la Dirección Nacional de Casinos en todo el Uruguay cerraron sus puertas a mediados de marzo de 2020, y reabrieron en agosto, con estrictas medidas sanitarias y solo el 53% de las máquinas operativas.
En un contexto de menores ingresos y siguiendo lineamientos dispuestos por el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), la Dirección General de Casinos llevó adelante varias acciones para recortar gastos, según dice la memoria anual del Poder Ejecutivo publicada esta semana.
Con relación a las inversiones, se explica que fueron restringidas “a las mínimas necesarias e indispensables” para el funcionamiento y desarrollo de las actividades. En ese sentido, se suspendieron procedimientos de compras que estaban en curso, y se pospuso la ejecución de otros, con ahorros por US$ 2,7 millones.
Por otro lado, se pospuso para el próximo ejercicio la compra de slots por US$ 1.625.000, de sillas para slots por US$ 39.653, y el primer avance en las obras de reforma de la sala de Carmelo por US$ 400.000.
Según detalla el informe, las acciones promovidas implicaron un ahorro para el Estado de US$ 4,75 millones. Esa cifra, comparada con lo ejecutado por inversiones en 2019 (S$ 13,44 millones) representó un 35% de “abatimiento” de costos.
Y dentro de la estructura de costos, uno de los conceptos con mayor peso es el gasto derivado de los 43 contratos de arrendamiento de los inmuebles donde funcionan las salas de juego y la oficina central de Casinos.
Según dice la memoria, se realizaron contactos con los propietarios de los inmuebles y se planteó “la necesidad de reducir los importes” que se pagan por el alquiler.
También se da cuenta sobre un acuerdo logrado con el principal proveedor del software que utiliza el sistema de liquidación centralizada online, por el que se pesificó el precio del servicio contratado. Para ello se tomó el valor del dólar a $ 40, y se convino el pago del 50% del precio durante el cierre al público de las salas de juego. Ese acuerdo significó un ahorro mensual de $ 957.421 al mes que los establecimientos de juego permanecieron cerrados, y un ahorro mensual en el resto del ejercicio de $ 174.255, dice el informe.
Además se da cuenta de un ahorro en servicios de transporte de valores, vigilancia, bomberos, correspondencia, consumo de combustibles, pago de viáticos, limpieza y cortesías a clientes por $ 13,5 millones mensuales (unos US$ 319.000).
La memoria agrega que se suspendió el aporte que se realiza al Comité Olímpico por US$ 150.000, y que se realizó “un abatimiento del gasto” en el programa de Responsabilidad Social.
Por último, la Dirección de Casinos informa que en Maroñas, con menos carreras, se apostó lo mismo que en el ejercicio 2019. En Las Piedras la recaudación “subió en forma importante” con respecto al 2019, y el Sistema Integrado Nacional de Turf (SINT), corriendo solo sin estar intercalado con Las Piedras, también aumentó su recaudación e inscripciones.