Los hosteleros valencianos nucleados en SOS Hostelería presentaron un recurso ante el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJCV) para requerir la suspensión inmediata de la resolución de 11 de marzo de 2021 de la consellera de Sanidad Universal y Salud Pública, que prohíbe las actividades y máquinas recreativas dentro de sus establecimientos. "No han explicado ni motivado en qué medida su uso supone un mayor riesgo de favorecer la trasmisión del virus en relación a aquellas otras actividades a las que sí se permite su ejercicio", argumentaron.
El presidente de SOS Hostelería, Fidel Molina, denunció "discriminación y arbitrariedad" por parte de la Generalitat al "prohibir el uso de las máquinas tipo B en los bares mientras permite el uso de máquinas de tabaco, vending, parquímetros o cajeros automáticos, entre otros". "El ejercicio de actividades o máquinas recreativas dentro de los establecimientos de restauración y hostelería es perfectamente compatible con el uso continuado de la mascarilla y la desinfección de éstas después de cada uso y es equivalente a la dinámica de otros sectores como el del comercio", explicó.
"Detrás de dicha prohibición se esconden motivaciones muy diferentes a la lucha contra la pandemia. Todos sabemos que las actividades relacionadas con el juego y las máquinas recreativas no cuentan con excesiva simpatía entre la actual administración autonómica y mantener las máquinas cerradas en bares y restaurantes es la prueba evidente", denunció.
Molina además aseguró que las máquinas tipo B instaladas en los bares son una ayuda imprescindible para poder mantener los locales abiertos, pagar el alquiler o los autónomos.