La Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA) publicó un balance sobre 2020 y destacó el rol en términos de financiamiento que tuvieron los esports y las licencias que le correponden por eso. Algo similar sucedió con las apuestas deportivas durante la pandemia de COVID-19, que encontraron en los deportes virtuales una alternativa productiva, que genera cada día más expectativas y se consolida en muchas casas de apuestas.
"Debido a la falta de competiciones en 2020, la venta de derechos de explotación de licencias, que suma US$ 159 millones, supuso la mayor parte de ingresos generados, un notable 24% más de lo presupuestado. Una fuente importantísima de ingresos en la venta de derechos de explotación de licencias fue la licencia de marcas para videojuegos", reconoció la FIFA en el informe, donde además detalló que del total de ingresos que tuvieron (US$ 266 millones), es la primera vez más de la mitad correponde a este rubro.
"En contraste con los muchos sectores económicos que se vieron drásticamente afectados por el COVID-19, la industria de los videojuegos demostró ser mucho más resistente a la pandemia", describió la FIFA. Y, según reconocieron muchísimos referentes de las apuestas deportivas, también sucedió lo mismo en el sector.
"Los esports van a empezar a tener más espacio. El hecho que se metan los clubes de fútbol, nuevos jugadores que no son de la industria, los deportistas importantes, las grandes agencias que ya tienen una pata en el rubro, dan una energía enorme", aseguró el CEO de Infinity Esports, Diego Foresi en una charla virtual de SBC Digital de principios de este mes. En la misma conferencia, el CEO de Live Media SAC, Luis Carrillo Pinto, también ejemplificó como ambas industrias podrían potenciarse, cuando contó sobre el experimento científico que realizaron en una casa de apuestas, que pusieron en "dos habitaciones a dos grupos de personas con comida y bebida para que vean una partida y a unos les permitieron apostar y a otros no", lo que dio como resultado estímulos positivos para la actividad en quienes sí podían hacerlo.
"El año pasado con la pandemia todo el mundo se dio cuenta que había un espectáculo, una competencia que no paró, y empezaron a mirar qué es lo que ocurre ahí. Y quienes veníamos construyendo esta Arca de Noé desde hace más de cinco años, fuimos escuchados y vieron que hay una nueva industria que hay que mirar hacia adelante", relató en el encuentro virtual el CEO de Siempre Games, David Fica Jaque, quien trabajó antes en los compañías del sector del juego chilenas Dreams y Enjoy.
Es una tendencia que tiene efectos de crecimiento y perspectivas en todo el planeta. La consultora Interpret realizó una encuesta a más de 500 aficionados a los esports de EE.UU. sobre si participarían en apuestas deportivas en eventos virtuales y el 52% contestó de forma afirmativa. Son estadísticas que evidencian el amplio mercado y la potencial llegada a un público más joven que el habitual que tiene el sector.
El salto fue tal, que cada vez más competencias virtuales son supervisadas por agencias como Sportradar, para garantizar la integridad deportiva, como lo hace en la liga de Esports Movistar LPG de Perú. Es que "las apuestas en esports han venido a Latinoamérica para quedarse", como afirmó a Yogonet el representante regional de Mobadoo, José Aníbal Aguirre. Y además de tener mucho presente, como demostró la facturación 2020 del servicio de apuestas uruguayo Supermatch, donde registró que la actividad representó un 10% del total, tiene mucho futuro, como aseguró el director de Productos Online de Strendus, Eduardo Peláez, cuando estimó que "las apuestas en esports en México podrían crecer un 20% en los próximos cinco años".
Sin duda la pandemia evidenció una disciplina que dejó de ser hobby desde hace mucho tiempo para transformarse en un negocio rentable, y al cual las apuestas deportivas le prestaron especial atención por el cese de las disciplinas, y se encontraron con más que una alternativa pasajera.