El Gobierno de Uruguay decretó mantener hasta fin de mes las medidas adoptadas para prevenir contagios de COVID-19, con la excepción del cierre de gimnasios y tiendas libres de impuestos, que reabrirán el lunes próximo.
El decreto, firmado este miércoles por el presidente uruguayo, Luis Lacalle Pou y su gabinete, y que puede verse en la web de Presidencia, dispone que se amplíe la suspensión de fiestas, eventos sociales y espectáculos públicos, el cierre de las plazas de comidas de centros comerciales y los casinos, así como la exhortación al teletrabajo en oficinas públicas.
El gobierno decidió extender de esta manera y por una semana más, las medidas para bajar la movilidad. De esta forma, la situación de las salas de juego se mantendrá suspendida y no podrán abrir sus puertas al menos hasta el 30 de mayo.
Cabe recordar que en su conferencia del 8 de abril, Lacalle Pou dejó clara su postura: “Las medidas tomadas son suficientes si se cumplen”. Y el 28 de abril, al anunciar la extensión, confesó que no estaba conforme con la baja de casos ni con la de la movilidad. “Si bien hay un descenso, esperamos que sea mayor”, enfatizó.
“Tenemos una luz que genera esperanza, que es la baja de casos del personal de la salud, que es notoria, y tenemos una vacunación avanzada”, dijo en ese momento el mandatario.