"Había unos intereses económicos muy potentes de todo lo que tiene que ver con la publicidad de las casas de apuestas y desde el Ministerio hemos antepuesto la protección de la salud y, por lo tanto, quienes en esta viaje han tenido pérdidas económicas, han decidido recurrirlo", explicó Arana sobre el proceso judicial de la medida. "El objetivo no es perjudicar económicamente a nadie, sino intentar defender la salud pública y los derechos de los colectivos más vulnerables", agregó.
Durante la entrevista realizada por la RNE, el funcionario fue cuestionado acerca de las similitudes y diferencias con otras industrias vedadas o prohibidas: "El propio decreto justifica cuáles son las diferencias entre el consumo de tabaco, que en cualquier caso es perjudicial para la salud, y un consumo de juego, que en la mayoría de los casos no es perjudicial para quien la desarrolla".
"Lo cierto es que no es una actividad inocua, que hay gente que tiene verdaderos problemas y dramas familiares, pero tampoco se puede equiparar 100% al tabaco", comparó.
También se refirió a que, según le dijeron desde asociaciones de jugadores rehabilitados, es un alivio que quienes se recuperaron de una patología vinculada a las apuestas dejen de recibir el "bombardeo constante" de publicidades. "Por otro lado aspiramos que aquellas personas que están entrando al mundo del juego no desarrollen una patología por no tener un bombardeo constante de que el juego es inocuo y que no le va a pasar nada", detalló.
El funcionario español saltó a la fama hace unos meses cuando, en medio del debate por las medidas restrictivas a nivel publicitario contra la industria, declaró que "la mayoría de gente que juega lo hace como una actividad de ocio y no le supone un problema de salud".