Al ingresar al local, los oficiales verificaron que se ofrecían perfumes, cosméticos y otros elementos de marcas apócrifas que no contaban con la aprobación de la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica y que podrían haber ingresado al país de forma ilegal.
Durante el procedimiento, además, se encontró en una habitación una mesa, como las utilizadas en los casinos, y varios juegos de naipes, fichas de distintos valores y anotaciones.
La fiscal Lorena San Marco, a cargo de la Fiscalía Penal, Contravencional y de Faltas Número 19, dispuso la detención del responsable del lugar, lo imputó por infringir los artículos 201 (mercadería peligrosa para la salud) y 301 Bis del Código Penal (juego clandestino), y ordenó el secuestro de toda la mercadería.
En el operativo, trabajó personal de la División Delitos Contra la Salud y Seguridad Personal de la Policía de la Ciudad, de la Dirección General de Fiscalización y Control, la Protección al Trabajo del Gobierno porteño y la Dirección General de Coordinación Operativa, dependiente de la Subsecretaría de Seguridad Ciudadana.