Las autoridades de la Región Administrativa Especial china de Macao ordenaron el cierre de los casinos por primera vez en dos años, a partir de este lunes y durante al menos una semana, a causa de un repunte en los casos de COVID-19, específicamente de su variante ómicron.
Según la agencia Europapress, la decisión fue anunciada el sábado por el presidente ejecutivo de la región, Ho Iat Seng, mediante un decreto que, además, suspenderá el ejercicio de todas las empresas industriales y comerciales no esenciales durante el mismo periodo de tiempo, hasta la medianoche del 18 de julio.
En tanto, de acuerdo al medio chino South China Morning Post, la medida gubernamental recomendó el confinamiento e impuso el uso obligatorio de mascarillas faciales para todos los adultos que salgan a la calle.
Dichas medidas, añadieron, fueron tomadas luego de la confirmación este domingo de otros 93 nuevos casos de COVID-19, lo que eleva el número total de contagios a 1.467 desde mediados de junio.
Cabe señalar que la industria del juego de Macao fue duramente golpeada a causa de la pandemia —iniciada en marzo del 2020—, registrando una caída interanual aproximada del 68% y perdiendo alrededor de EUR 380 millones (USD 383 millones).
En junio, la Asamblea Legislativa de Macao aprobó una nueva ley del juego —que reemplazó a una del 2001—, la cual allanó el camino para que los funcionarios comiencen el proceso de emisión de nuevas licencias de casinos, ya que las actuales expiran este año.
Según la nueva legislación, el número de nuevas licencias se limita a seis y los nuevos permisos se concederán por un máximo de 10 años, lo que supone una reducción de los 20 años actuales. Los funcionarios de Macao están facultados para sancionar a los operadores de casinos por una serie de razones, entre ellas el bajo rendimiento de los ingresos y la amenaza a la seguridad nacional.