La Comisión de Control del Juego y Casinos de Victoria (VGCCC) anunció este lunes una multa récord de 120 millones de dólares australianos (77,7 millones de dólares) a Crown Melbourne. La sanción pretende enviar "un poderoso mensaje" a la empresa indicando que no se tolerará la mala conducta, según el regulador.
La sanción económica se impuso por dos cuestiones distintas que pesan sobre la idoneidad de Crown para mantener su licencia. La multa de 100 millones de dólares australianos se debe a que la empresa no impidió que la gente jugara durante más de 24 horas seguidas. La otra, de 20 millones de dólares australianos, se impuso porque el casino no impidió que los clientes utilizaran picos de plástico para simular el "juego automático" al jugar en determinadas máquinas.
El operador tiene nuevos propietarios y está prometiendo reformas. Sin embargo, los reguladores aseguran que han visto resistencia por parte de la empresa, similar a la actitud de la "antigua Crown". En un informe, afirman que se han quedado con la impresión de que "Crown Melbourne está decidida a seguir interactuando con la Comisión de la misma manera que lo hacía con el anterior regulador", informó ABC Net News.
La respuesta de Crown ha sido descrita como "reminiscente de la antigua Crown, que Crown Melbourne sigue diciendo que desea dejar atrás". También incluyó la presentación de alegaciones "no respaldadas o contradichas por las pruebas", el no facilitar documentos a los investigadores y el hacer afirmaciones sobre la ley pero sin dar a la comisión nada que las respalde.
Crown Melbourne cuenta actualmente con un monitor especial que supervisa sus operaciones, que continuará con la tarea durante los próximos 15 meses. Al final de dicho periodo, el monitor y el regulador decidirán si la empresa es "apta" para tener la licencia.En el informe se advertía a Crown Melbourne de que debía "mejorar" su trato con el regulador, especialmente a la hora de facilitar los documentos solicitados en virtud de los poderes obligatorios. El regulador aseguró entonces que si la forma de responder a esta investigación era "el total del trabajo que se estaba haciendo, entonces la Comisión tendría motivos para estar preocupada", informó la citada fuente.
Según la presidenta de la VGCCC, Fran Thorn, Crown se esfuerza actualmente por ser digno de confianza y cumplir el concepto de lo que es un asociado adecuado. Sin embargo, sigue existiendo una laguna normativa, ya que los reguladores estatales sólo pueden investigar y perseguir a las personas que actualmente trabajan en el casino.
Thorn dijo además que se envió a Crown un "poderoso mensaje" de que la Comisión no tolerará la mala conducta, ya que no se trataba de episodios aislados. "Fueron un patrón de fallos extensos, sostenidos y sistémicos que abarcaron aproximadamente 12 años", señaló
Crown Resorts dijo en un comunicado que está "realmente arrepentido", y aseguró que ha invertido mucho en su programa de corrección, incluyendo recursos de Juego Responsable. Su equipo de liderazgo recientemente nombrado también forma parte de su plan, y se dice que está "impulsando un programa de transformación de toda la empresa diseñado para elevar la cultura y construir una Crown mejor", según un comunicado.
La VGCCC dijo que Crown aceptaba la medida disciplinaria y la necesidad de seguir trabajando en las reformas. Es la segunda vez que el regulador hace uso de sus mayores poderes de ejecución para tomar medidas contra el operador de casinos. A principios de este año, impuso una multa de 80 millones de dólares australianos (51,7 millones de dólares estadounidenses) a Crown por tener un plan que permitía la transferencia ilegal de fondos desde China.