Andorra inauguró su primer casino con más de 1.500 visitantes y un gran despliegue tecnológico

Una gran cantidad de público se dio cita el sábado pasado, en el complejo Unnic, para asistir después de dos años y medio de obras, de la apertura del Gran Casino de Andorra. El acto permitió la primera sala de juegos de su historia, en compañía de más de 1.500 visitantes y con las reservas agotadas para acceder a las zonas VIP.

Presidido por el Cap de Govern en funciones, Xavier Espot, el acto de apertura permitió luego el acceso al público, a partir de las cinco de la tarde. Todos los restaurantes del complejo estaban llenos a la hora de cenar y la mayor parte del público, cerca del 70%, eran personas residentes en Andorra, mientras que solo el 30% procedía de otros países, según fuentes de la empresa.

Por su parte, el Gobierno local aseguró que tienen confianza en que el casino y el resto de la oferta de ocio de Unnic contribuyan a diversificar y desestacionalizar la oferta turística del país, ahora muy concentrada en los meses de invierno y verano.

El ministro andorrano de Turismo en funciones, Jordi Torres, se mostró convencido que Unnic “será un complemento muy importante para el turismo” del Principado, y “una palanca más para diversificarlo”.

“Aquí culmina la apuesta del Gobierno en esta legislatura y la anterior, con la licitación para poder disponer de un espacio de juego”, dijo. El complejo está a solo diez kilómetros de La Seu y a menos de dos horas de la ciudad de Lleida. Por este motivo, Unnic considera a los vecinos del Pirineo y, en concreto, de las comarcas de Lleida, como posibles “clientes de proximidad”.

El director general de Unnic, Ivan Armengod, recalcó la orientación del centro hacia “el ocio y el entretenimiento”, y puntualizó que “solo dirige el 20% de su oferta al juego”.

El casino estará abierto de domingos a jueves hasta las tres de la madrugada, y los viernes y sábados hasta las cuatro y media. Según Armengod, Unnic también organizará torneos profesionales de póquer.

Cabe recordar que la plantilla de trabajadores es de 200 personas, una gran parte de ellas empleados en establecimientos de restauración. Jocs S.A., empresa que gestiona este nuevo complejo de ocio junto al Grupo Orenes, espera recibir unos 190.000 visitantes al año, y se supo que la sociedad ha llevado a cabo una inversión de 35 millones de euros para poder abrir las puertas del complejo.