La Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) presentó ante el Ministerio de Hacienda una demanda de modificación de la normativa que regulará las apuestas deportivas, a fin de que las entidades deportivas que la conforman obtengan mayores ingresos económicos de dicho sector.
Actualmente, de acuerdo a la Ley 13.756/18, las entidades deportivas brasileñas que cedan sus marcas a las casas de apuestas tendrán derecho al 1,63% de los ingresos netos obtenidos por dichas empresas. Según diversos medios, la intención de la CBF es sustituir ese porcentaje el 4% sobre los ingresos brutos.
En su propuesta, la CBF también plantea que el Gobierno considere la transferencia financiera no como dinero público, sino como una remuneración por el uso de las marcas de los clubes y campeonatos. De esta manera, la entidad quedará libre de la inspección de los organismos públicos.
Además, señalaron que la CBF defiende la creación de un registro de operadores de casas de apuestas, cuyo control correspondería a la propia confederación; y justifica que el registro serviría para supervisar la cesión de derechos comerciales, controlar las transferencias y crear mecanismos contra la manipulación de resultados.
De acuerdo a lo informado, las demandas de la CBF fueron trasladadas al Ministerio de Hacienda por su secretario general, Alcino Rocha. Añadieron que estas “no fueron bien recibidas”, por lo que la confederación apunta a concertar una reunión con el presidente Luiz Inácio Lula da Silva y el ministro Fernando Haddad.
Consultados por el medio brasileño Globo, la CBF indicó que “el documento en cuestión, enviado a petición del Ministerio de Finanzas, es aún preliminar” y que “se trata de una cuestión compleja y sin precedentes” que “será sometido a la consideración de todas las partes implicadas”.
Asimismo, apuntaron que “todos los clubes presentes fueron informados de que el documento presentado no era un texto definitivo, sino sólo un punto de partida”.
El presidente de la CBF, Ednaldo Rodrigues, sostuvo que en su gestión “siempre se respetará el diálogo abierto y democrático”, y que “sólo después de un amplio debate, la agenda de una medida provisional será remitida al Gobierno Federal”.
“Nuestro compromiso es escuchar y dar voz a todos. Es innegable que los ingresos de las apuestas son otra fuente de ingresos para los clubes. Pero es necesario entender, discutir y llegar a un consenso”, remarcó finalmente.