En un completo análisis de la situación de las importaciones de equipos de juego en la Argentina, Cristian Galarza, director y fundador de ASAP, empresa de logística aplicada a la industria del juego, consultor en temas cambiarios y de COMEX, aseguró que “desde la llegada del nuevo gobierno argentino, el 10 de diciembre pasado, han comenzado a publicarse un sinnúmero de normas que descomprimen un poco la situación del sector de juego”. A continuación, su análisis completo:
En los últimos 18 meses, los mecanismos de importación y pago han sufrido diferentes transformaciones en Argentina; y en particular, el sector de Gaming ha sido uno de los más golpeados.
Con la aplicación de impuestos prácticamente confiscatorios, la dilación de los plazos de pago al exterior hasta los 360 días después de haberse despachado la mercadería en Argentina, y hasta la casi virtual prohibición de importar (el sistema SIRA estaba prácticamente vedado para los importadores de slots y demás equipamiento), las empresas del sector estuvieron paralizadas y la renovación de máquinas por parte de los operadores fue una misión imposible.
Desde la llegada del nuevo gobierno el 10 de diciembre pasado, han comenzado a publicarse un sinnúmero de normas que descomprimen un poco la situación del sector.
En primer lugar, ha dejado de existir la SIRA (Sistema de Información de la República Argentina), para darle paso al SEDI (Sistema de Estadísticas de Importación).
Si bien en el pasado ya se habían realizado cambios semánticos, que no tenían ningún efecto en el día a día de las operaciones, esta vez el cambio fue radical: desde el advenimiento de la SEDI, el sistema se convirtió en un trámite automático, de aprobación inmediata.
Con la excepción de las mercaderías que requieren de intervenciones de terceros organismos, las SEDI son autorizadas en el término de 24 horas. De esta manera, uno de los grandes problemas que tenían los importadores del sector ha quedado resuelto. ¡Ahora, importar es posible! ¿Pero qué pasa con los pagos al exterior?
La normativa vigente divide al universo de los pagos en dos: todas las importaciones con despacho oficializado (presentado a la Aduana) antes del 13/12/2023, y todo lo oficializado con posterioridad a esa fecha.
Y siempre hablando de la industria de gaming, sabemos ahora que la mayoría de las importaciones podrán pagarse al exterior a los 180 días de la fecha de oficialización del despacho.
Por lo tanto, en caso de contar con el financiamiento del proveedor, el importar máquinas y accesorios para el sector volverá a ser un trámite ágil y relativamente sencillo.
Respecto de lo que el mercado conoce como “Stock de deuda” (la deuda anterior al 13/12/2023), las posibilidades son unas pocas:
- Consulta previa al Banco Central de la República Argentina (BCRA): esta consulta se realiza a través de los bancos comerciales, y no tienen respuesta por parte del BCRA. Por lo tanto, por el momento es una opción que no vale la pena explorar.
- BOPREAL: bonos emitidos por el BCRA, al que solo pueden acceder los importadores con deuda, y por hasta el valor de la misma.
- Contado con liquidación (CCL): esta modalidad implica comprar con pesos, bonos nominados en dólares, para luego venderlos en los mercados internacionales y finalmente, hacerle llegar el pago al proveedor. Mas allá del alto costo que tiene esta operatoria, la misma restringe luego el acceso del importador al Mercado Oficial de Cambios (en algunos casos por 90 días, en otros casos por 180).
- Otras opciones ofrecidas por empresas particulares (Trading, Factoring, Sistemas de Garantías).
Todas estas opciones de pago tienen diferentes modalidades e implicancias, dependiendo de la situación del importador y su proveedor, de la relación entre ellos, de la posición en pesos o en dólares de los importadores para realizar los pago y si las deudas fueron declaradas en el padrón de importadores, ente otros.
En definitiva, para que una estrategia de pagos sea eficiente, es necesario armarla con toda la información disponible sobre la mesa.
(*) Cristian Galarza es Director de ASAP, consultor en temas cambiarios y de COMEX, y estará visitando la próxima edición de ICE, donde podrá reunirse con los interesados para conversar sobre el futuro cercano de las importaciones en Argentina.