El Casino Metro de Puerto Rico anunció una inversión de USD 6 millones en 150 nuevas máquinas tragamonedas y seis mesas de juego, adquiridas con el objetivo de aumentar las apuestas que se realizan en esta sala de juegos y, además, incrementar la recaudación que se deriva a la Universidad de Puerto Rico y al Fondo General.
Desde el Casino Metro, ubicado en el Hotel Sheraton del Centro de Convenciones en Miramar, estiman que la inversión realizada debería “traer un aumento de 30% en las contribuciones que hacen a los diversos fondos a los que, por ley, llega una tajada de los juegos de azar en casinos”.
Sobre la inversión, el gerente general del casino, Ismael Vega, expresó: “Son 150 máquinas tragamonedas adicionales, de 500 que teníamos. Eso es 30% del crecimiento y no es poca cosa. Es una expansión grande. Hay casinos con la cantidad de máquinas que tenemos nosotros sólo en la expansión”.
“Somos el casino principal de la isla en cuanto a recaudos, el más que aportamos al grupo B, que es la Compañía de Turismo [de Puerto Rico], la UPR y el Fondo General. Casi llegamos a USD 20 millones en aportaciones a ese grupo y aquí podemos traer USD 5 millones más, si calculas que hay 30% más de negocio”, explicó.
La semana pasada se realizó un evento para inaugurar una nueva área de juegos, donde permanecerán las 150 nuevas slots y las seis nuevas mesas, que suman 28 en total para el operador presencial de San Juan.
Con la expansión, se suman otros 30,000 pies cuadrados al casino, ubicado en el vestíbulo del hotel ancla del Distrito de Convenciones. La expansión, a su vez, aumenta la fuerza trabajadora del casino a 235.
Ismael Vega, gerente general del Casino Metro
En otro momento, Vega indicó que el 80% de los clientes del casino son locales, mientras que el 20% son turistas que usualmente prefieren los juegos en mesa. Añadió que, con la adición de las máquinas nuevas, su expectativa es que esa tendencia continúe.
“Este hotel, por ser un hotel corporativo, de convenciones, recibimos muchos turistas. Si vienes en la mañana hay mucho local, pero entrada la tarde, hay más turistas en las mesas. La proporción es 80% local y 20% turista”, detalló.