El presidente de la Lotería de Río de Janeiro (Loterj), Hazenclever Lopes Cançado, concedió una entrevista a la Corporación Iberoamericana de Loterías y Apuestas (Cibelae) y declaró que la autoridad carioca "está volando, haciendo un trabajo disruptivo, innovador y osado, ofreciendo opciones reales para quien quiere trabajar de forma legalizada".
Una vez más, calificó la competencia con las plataformas ilegales, que aún operan en Brasil sin pagar impuestos y sin garantizar la seguridad de los jugadores, como uno de los mayores desafíos para el funcionamiento de Loterj y otras loterías en Brasil.
Cançado también afirmó que Río de Janeiro se presenta como un "océano azul" para las casas de apuestas, ya que tiene la segunda mayor economía de Brasil y la ventaja de que "el juego forma parte de la cultura carioca".
La atracción de gigantes del mercado sería una prueba del éxito de las acciones de Loterj: "El grupo Caesar Sports, el mayor casino de Las Vegas, eligió Río de Janeiro por nuestra seguridad jurídica y atractivo financiero", afirmó. Además, empresas como 1xBet ya están tramitando la licencia para operar en el estado.
Loterj se convirtió en miembro de Cibelae en febrero, y es una de las loterías estatales con el proceso de regulación más avanzado del país. Pero parte de lo que su presidente clasifica como trabajo innovador ha sido percibido por el mercado y el Gobierno federal como competencia desleal.
La autoridad se ha visto envuelta en una polémica desde que empezó a permitir que empresas registradas en el estado de Río de Janeiro operasen apuestas deportivas a nivel estatal, pero que aceptasen clientes de todo Brasil. Con una licencia de explotación de BRL 5 millones (USD 933.065), mientras que el Gobierno Federal pide 30 millones (USD 5.598.390), la acción se ve envuelta en un embrollo jurídico.
Loterj fue notificada por el Ministerio de Hacienda para que dejara de acreditar casas de apuestas en el estado, ya que no estableció un límite para que las empresas operaran sólo en Río de Janeiro.
Cançado ha defendido públicamente el modelo de acreditación, y aseguró que "no hay ilegalidades" en las acciones.