La Argentina es un país donde la industria de los juegos de azar presenta una realidad bastante particular, ya que la regulación sobre esta actividad es jurisdiccional. Por lo tanto, cada provincia y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires manejan sus propias normativas dentro de su territorio.
Una de las empresas que logró instalarse en la industria argentina del juego es Win Play, a partir de afianzar diversos productos en varias provincias del país. Yogonet pudo charlar con Carlos Gallo, su presidente, para conocer más sobre la actividad de la compañía así como de la actualidad del rubro en la región.
¿Podría contarnos un poco sobre el comienzo de Win Play? ¿Cómo ha sido su historia dentro de la industria del juego?
Win Play comenzó como una empresa dedicada a mejorar la eficiencia y seguridad en la entrega de productos dentro de la industria del juego. Desde el principio, hemos trabajado para garantizar que nuestros productos estén disponibles para los clientes de la manera más eficaz, lo que ha sido clave para establecer nuestra sólida presencia en el sector. A lo largo de nuestra historia, hemos perfeccionado procesos que nos permiten ofrecer un servicio confiable y de alta calidad, fortaleciendo nuestra posición en el mercado.
Actualmente, la compañía comercializa dos productos, Money Lotería Instantánea y Money Online. ¿De qué se tratan y cómo son las modalidades de juego?
Por la experiencia en el rubro desarrollamos estos juegos, con ambos productos firmamos convenios de comercialización con el Instituto de Juegos de Azar de Neuquén (IJAN).
Money Lotería Instantánea es la Primera certificada con Norma ISO 9001 en el país, una raspadita física disponible a la venta en las agencias oficiales, donde los jugadores pueden raspar el cartón para revelar premios al instante.
Money Online, por su parte, es la primera raspadita en modalidad digital desarrollada en Argentina. Esta versión digital de la tradicional raspadita se comercializa a través de las plataformas de juegos bet.ar.
¿En qué provincias está presente en la actualidad?
Money Lotería Instantánea está disponible en Neuquén, Santa Cruz, Chubut, La Pampa, Río Negro, La Rioja, Entre Ríos y Salta, y está previsto que se expanda a más provincias en el futuro. Por su parte, Money Online actualmente opera en Río Negro y Neuquén, con planes de ampliación en otras jurisdicciones.
¿Qué planes de expansión tiene la compañía? ¿Tienen alguna estrategia marcada para ganar mercado?
Estamos en proceso de expandir nuestros juegos a otras jurisdicciones a nivel nacional y llevar nuestros productos a Latinoamérica. Además, estamos trabajando en la incorporación de nuevos juegos y temáticas para diversificar nuestra oferta. Para alcanzar estos objetivos, fortaleceremos nuestra presencia en congresos de juegos en la región y estamos estableciendo convenios con empresas del sector para formar alianzas estratégicas.
La Argentina posee una particularidad respecto a la regulación del juego, teniendo una independencia de jurisdicciones. ¿Cuáles considera que son las fortalezas y las oportunidades de un sistema de estas características?
La principal fortaleza de la independencia de jurisdicciones en la regulación del juego en Argentina es la capacidad de cada provincia para adaptar las normativas a sus propias necesidades y realidades. Esto permite una regulación más precisa y relevante para cada área, facilitando la implementación de políticas de juego responsable que respondan a las características particulares de cada provincia. Sin embargo, esta diversidad también puede presentar desafíos en términos de coordinación entre jurisdicciones y estandarización de regulaciones. Una mayor armonización en las políticas de juego responsable podría mejorar la protección del jugador y la transparencia en todo el país.
Como operador, ¿qué cambios le gustaría ver en la industria del juego en el país?
Como operador, nos gustaría ver una mayor uniformidad en la regulación del juego a nivel nacional. Una normativa más estandarizada facilitaría la gestión y coordinación entre provincias, simplificando los procesos operativos y reduciendo las complejidades legales. Además, sería beneficioso fortalecer las políticas de juego responsable y asegurar que todos los operadores adopten prácticas consistentes en protección del jugador y prevención de adicciones. Estos cambios no solo mejorarían la eficiencia del sector, sino que también promoverían un entorno de juego más seguro y transparente para los consumidores.