La nueva directora de la Lotería Nacional de Beneficencia (LNB) de Panamá, Saquina Jaramillo, adelantó algunos de los principales desafíos de la entidad, así como las medidas para abordarlos, entre ellos la modernización de las agencias, la actualización de los premios y la publicación de las libretas con sus respectivos adjudicatarios.
En declaraciones recientes, la funcionaria destacó la falta de mantenimiento y atención de las 23 agencias de la LNB, las cuales “están en franco deterioro por falta de voluntad de la administración previa”, y anticipó que se encuentran analizando las distintas sucursales con miras a “poner empeño para darle el matiz que la lotería se merece”.
Asimismo, precisó que buscan mejorar los premios que reciben los ganadores de la LNB. Para eso, la institución llevará adelante un estudio en conjunto con la Universidad Tecnológica de Panamá (UTP).
"Tenemos que trabajar conjuntamente con la UTP con respecto a lo que es un convenio de cooperación para que se realicen los estudios de los premios que paga actualmente la LNB, así como el porcentaje a pagar a los billeteros", explicó.
"Ellos realizarán los estudios correspondientes para mejorar los premios y, una vez se mejoren los premios, también se tiene que mejorar el porcentaje que los señores billeteros tienen", añadió.
Durante su presentación en la Asamblea Nacional, Jaramillo también informó que la institución publicará el nombre de todos los dueños de libretas de chances y billetes. Detalló que, en la actualidad, hay 13.000 billeteros y que, de esa cifra, han analizado 7.000 mientras que aún tienen en estudio el resto.
"Estamos en la capacidad de presentar el listado de los tenedores de estas libretas con sus montos. Vamos a sistematizar ese listado para que sea público a través del portal de transparencia", informó.
En este sentido, la funcionaria declaró que esta información no es de acceso restringido por lo que la LNB “se siente en la libertad de publicarla”. Además, recordó que la reglamentación establece que sólo se puede entregar una libreta por persona y quien tenga más deberá devolverla.