Otorgan la aprobación preliminar al nuevo operador Virgin Hotels Las Vegas mientras se agrava el conflicto laboral

La Junta de Control del Juego de Nevada aprobó, de manera preliminar, al nuevo operador de casinos para Virgin Hotels Las Vegas mientras se intensifica el prolongado conflicto laboral con los trabajadores en huelga, y los sindicatos exigen que se evalúe la capacidad de los empresarios de satisfacer las demandas de los empleados.

Según detallaron, los reguladores del juego de Nevada otorgaron su aprobación preliminar a C&C 4455, una entidad de nueva creación dirigida por los principales ejecutivos de Virgin, Cliff Atkinson y Chad Konrad, para supervisar las operaciones del casino.

Atkinson, presidente de la empresa, asumirá el cargo de CEO, mientras que Konrad seguirá siendo director financiero. En ese contexto, la Comisión del Juego de Nevada debe finalizar la decisión para que el cambio entre en vigor.

Al respecto, Atkinson manifestó: “Desde su reapertura (como Virgin Hotels Las Vegas en 2021), el establecimiento ha tenido problemas. El acuerdo con Mohegan simplemente no funcionó. La razón por la que estamos aquí es darle la vuelta con éxito a las operaciones de juego”.

La dirección planea dirigirse a los locales, activar espacios no utilizados, introducir nuevas opciones de entretenimiento y crear un programa de fidelización de clientes para atraer negocio y estabilizar las operaciones.

En tanto, la aprobación se produce mientras los miembros del sindicato culinario Local 226, que representan a una parte importante de la plantilla del casino, siguen en huelga. Esta comenzó el 15 de noviembre y es la manifestación más larga en la historia reciente de Las Vegas.

Los responsables sindicales sostienen que el grupo propietario de Virgin —que incluye un fondo de pensiones canadiense, Juniper Capital Management, y Virgin Group, dirigido por el multimillonario británico Richard Branson— dispone de amplios recursos para satisfacer sus demandas de un contrato comparable a los de otros casinos fuera de Strip, como Westgate y Sahara.

A partir de ello, Ted Pappageorge, secretario y tesorero del sindicato, sostuvo: “Estas empresas tienen los bolsillos muy llenos. La idea de que estas entidades económicas canadienses vengan a Las Vegas a intentar destruir nuestro nivel de vida que hemos trabajado durante décadas para construir es simplemente inaceptable”.

Los representantes sindicales también criticaron la ausencia de representantes de los propietarios en la reunión reguladora. “¿Por qué Nevada no exige que se incluya a los propietarios de Virgin Las Vegas en la revisión de la solicitud de licencia de explotación de casinos del propio complejo?”, cuestionó Paul Catha, miembro del sindicato y empleado de Virgin.

El presidente de la Junta de Control del Juego de Nevada, Kirk Hendrick, se refirió indirectamente a las preocupaciones sindicales, señalando que la junta había llevado a cabo una amplia investigación sobre los ejecutivos y el grupo propietario, incluida la revisión de un grueso expediente de investigación. 

En respuesta a las reclamaciones sindicales, Virgin Hotels Las Vegas acusó al sindicato de negarse a negociar de buena fe, afirmando que sus demandas son financieramente insostenibles.

“A pesar de que Virgin Hotels Las Vegas ha aceptado muchas de las demandas de los líderes del sindicato culinario y ha mostrado flexibilidad en puntos críticos, el sindicato culinario no ha respondido seriamente a ninguna de nuestras propuestas económicas, ni siquiera ha presentado nuestra última oferta a sus miembros para una votación formal”, advirtió el casino en un comunicado. 

Los directivos de C&C 4455 reiteraron que su objetivo es garantizar la estabilidad operativa al tiempo que se abordan los retos a los que se enfrenta el casino desde hace tiempo. “Ambos creemos de forma similar en la propiedad, en el casino en concreto y en nuestra capacidad para impulsar este casino desde el punto de vista del rendimiento y mantenerlo en funcionamiento”, concluyó Konrad.