El mercado de las apuestas en Brasil, recientemente regulado, experimentará un proceso de consolidación en los próximos cinco años. La previsión procede de André Gelfi, presidente del Instituto Brasileño de Juego Responsable (IBJR), que abordó la cuestión en una entrevista concedida a Exame el pasado sábado 11 de enero. Gelfi estimó que el número de empresas de apuestas que operan legalmente en el país se reducirá a unas 30 (actualmente hay 68 autorizadas).
Para Gelfi, Brasil no puede soportar el número actual de operadores, considerando que el 50% del mercado está en manos de apenas tres o cuatro grandes empresas.
"En mi opinión, el mercado brasileño no puede soportar 66 operadores [en una nueva actualización del Tesoro, el número ha subido a 68]. Si se considera que el 50% del mercado está en manos de tres o cuatro empresas, el otro 50% debe repartirse entre 55. Es decir, menos del 1% de cuota de mercado para cada una. No hay forma de mantener una operación así", explicó.
Según Gelfi, es probable que el movimiento de fusiones y adquisiciones cobre impulso en los próximos años, a medida que las plataformas más pequeñas y menos estructuradas sean absorbidas por los grandes operadores. También subrayó que la lucha contra los sitios ilegales y el control de la publicidad en las redes sociales serán temas centrales para la evolución del sector.
El titular del IBJR también reveló que, en su evaluación, las plataformas de apuestas ilegales deberían eliminarse en gran medida en un plazo de seis meses. "Mi expectativa es que el 70% de este problema se resuelva en seis meses. Luego quedará el resto, que es más difícil. Las más flagrantes, las grandes empresas no autorizadas, se eliminarán más rápidamente", comentó.
Sobre el tema de la publicidad, alertó sobre el uso excesivo de influencers para promover el juego en Brasil, especialmente cuando el mensaje subliminal asociado a los anuncios puede inducir a los consumidores a creer que el juego es una forma de generar ganancias fáciles.
"El gran problema es el mensaje subliminal: 'Estoy ganando en este juego y me he comprado este coche'. Esto puede parecer indirecto, pero es lo que recibe el espectador. Hay una gran responsabilidad en lo que comunican estas plataformas y los influencers", remarcó.
Otra de las preocupaciones que abordó Gelfi fue el uso de las ayudas sociales para apostar, algo que el sector quiere evitar. "Si no te sobra dinero en tu presupuesto para gastarlo en ocio, no deberías apostar", declaró.
Garantizó que, si el Gobierno decidiera prohibir la participación en las apuestas de los beneficiarios de programas sociales, como Bolsa Família, las empresas asociadas al IBJR aplicarían la medida de inmediato.
A pesar de las expectativas de disminución del número de casas de apuestas en Brasil, de acuerdo a Gelfi, el sector tiene mucho espacio para crecer de forma sostenible. "Hoy, las apuestas representan menos del 0,5% del PIB brasileño. En países como España, el sector alcanza el 1%. Esto demuestra que hay mucho espacio para crecer, pero de forma responsable y sostenible", añadió.
Finalmente, Gelfi destacó que el IBJR, que agrupa a las empresas del sector regulado de las apuestas en Brasil, pretende garantizar prácticas responsables y ser un defensor de la regulación y el cumplimiento de la ley, "separando a las empresas serias de las que operan de manera informal".