El presidente Trump visitó Las Vegas y despertó elogios de los líderes de la industria

El presidente Donald Trump recorrió este fin de semana el Circa Resort and Casino, en el centro de Las Vegas, lo que ha despertado el entusiasmo de las partes interesadas del sector del juego. La visita, organizada por el copropietario de Circa, Derek Stevens, se centró en cuestiones fiscales clave que afectan a la industria, en particular la presión para elevar el umbral impositivo de las tragamonedas y eliminar el impuesto especial federal sobre las apuestas deportivas.  

La llegada del mandatario a Las Vegas fue elogiada por la American Gaming Association (AGA), que ha abogado por reformas fiscales que alivien las cargas reguladoras del sector. El presidente y CEO de AGA, Bill Miller, expresó que la visita demuestra que la nueva administración reconoce la contribución de la industria del juego a la creación de empleo y el crecimiento económico.

"El tremendo apoyo del presidente Trump a la industria del juego durante su primer mandato no tuvo precedentes: por primera vez en la historia, nuestra industria pudo obtener alivio económico federal a raíz de los cierres de COVID-19. Esperamos un mayor compromiso con el presidente Trump a lo largo de este año en la política fiscal crítica y otras prioridades importantes de la industria", señaló Miller en un comunicado.

Stevens, que también es propietario de The D Las Vegas y Golden Gate, declaró que recibió un aviso de la visita apenas unos días antes de que tuviera lugar. Dio crédito a los funcionarios del Partido Republicano de Nevada, incluida la miembro del Comité Nacional Republicano Sigal Chattah y el presidente del partido estatal Michael McDonald, por facilitar los arreglos. El equipo de Trump llegó a Circa poco después de confirmar la disponibilidad del lugar.   

Aunque Stevens ha mantenido tradicionalmente una postura neutral en asuntos políticos, declaró que consideraba que los temas en cuestión eran demasiado importantes como para ignorarlos. Afirmó que los cambios en la política fiscal no sólo beneficiarían a sus empleados, sino también a la comunidad de Las Vegas en general.  

Stevens, junto con otras partes interesadas en el juego, buscan que se elimine el impuesto sobre el ejercicio de las apuestas deportivas. El Código de Impuestos Internos impone actualmente un impuesto federal del 0,25% sobre el importe de cualquier apuesta deportiva legal con una casa de apuestas deportivas comercial, así como un impuesto anual adicional de USD 50 por cabeza por cada empleado que se dedique a recibir apuestas para o en nombre de cualquier operador de apuestas deportivas legales.

Según la AGA, este impuesto no tiene "ningún propósito específico" y representa un coste operativo añadido para las casas de apuestas deportivas legales que los operadores ilegales no pagan, lo que dificulta aún más el paso de los clientes del mercado ilegal a los canales regulados de apuestas deportivas.

Además, Stevens y el sector estadounidense en general están presionando para que se eleve a USD 5.000 el umbral de USD 1.200 para declarar el jackpot de las tragamonedas en el W-2 G (formulario fiscal). La actualización del umbral de declaración a un nivel más alto solucionaría cuatro décadas de efectos inflacionistas, para la AGA, lo que supondría un ahorro anual de hasta USD 500 millones para el sector.

"Elevar el umbral en ambos casos eliminará una enorme carga reglamentaria indebida y reducirá una enorme pérdida de tiempo en los casinos de todo el país", aseguró Stevens.

La visita también suscitó reacciones de otros líderes empresariales del centro de la ciudad. Jonathan Jossel, CEO del Plaza Hotel & Casino, dijo que la decisión de Trump de visitar el centro de Las Vegas refleja la creciente influencia de la zona. Indicó que es probable que el mensaje del presidente sobre la eliminación de los impuestos sobre las propinas resuene entre los trabajadores de la hostelería de todos los partidos.  

"Es simplemente increíble que haya elegido el centro de Las Vegas, de todos los lugares que podría haber elegido. Es un gran impulso para la zona, y el mensaje de no gravar las propinas es algo que será bien recibido", añadió Jossel.